Pon el cereal en un procesador de alimentos y pulsa hasta molerlo, debe salir ½ taza de cereal molido. Pon el cereal en un plato y reserva.
Escurre los garbanzos sobre un tazón o taza medidora, reserva los garbanzos y 1/4 taza del líquido (aquafaba). Coloca los garbanzos en el procesador de alimentos; Añade la sal, el ajo y la cebolla en polvo. Y pulsa hasta que se desmorone. Mantén la mezcla en el procesador de alimentos.
Bate 1/4 taza de líquido de garbanzo en un tazón pequeño hasta que la mezcla esté espumosa. Agrega la mezcla espumosa y la avena de a poco al procesador de alimentos. Presiona hasta que la mezcla forme una bola. Agrega más avena a la mezcla de garbanzos, una cucharada a la vez, si la mezcla está muy suelta.
Divide la masa de garbanzos en más o menos 12 porciones iguales y forma con cada una de ellas un nugget. Cubra cada nugget completamente en el cereal molido.
Puedes freír los nuggets o colócalos en la bandeja para horno con papel para hornear y hornea hasta que estén crujientes, de 15 a 20 minutos.
Sirve caliente con tu salsa favorita.
Notas
Nota: Las sobras se pueden almacenar en un recipiente hermético en el refrigerador hasta por 5 días.