Comienza utilizando un pelador de papas para pelar la berenjena
Corta la berenjena en cubos del tamaño que desees ya sean bites o Nuggets. Ponlos en un colador, espolvorea la berenjena con la sal, y utiliza tus manos para revolverlos. Deja escurrir en el colador sobre un tazón en el fregadero durante 30 minutos para eliminar el exceso de humedad.
Prepara tres tazones de tamaño mediano: En un tazón mezcla la harina y sazonar con sal y pimienta. En el segundo tazón mezcla la linaza molida y el agua (deja reposar esta mezcla unos 5-10 minutos para que espese). En el tercero mezcla el pan rallado y la levadura nutricional (para darle un sabor a queso).
Usa un tenedor o los dedos (el tenedor me resulta más fácil a mí) para agarrar un trozo de berenjena y sumergirlo en el primer tazón (la mezcla de harina) sacude el exceso, luego sumérgelo en el tazón con la mezcla de linaza y finalmente empanízalo en el tazón del pan o panko.
Ubícalo en un plato y repite el proceso con el resto de cubitos de berenjena.
Vierte aproximadamente ½ taza de aceite en una sartén. Y calienta a fuego medio. Para saber si el aceite está listo, deja caer al aceite una pequeña pieza, si salen burbujas y chisporrotea el aceite está listo!
Con cuidado pon varios cubitos de berenjena en el sartén con el aceite caliente y fríe durante 2-3 minutos de cada lado, hasta que tenga un color dorado uniforme.
Saca los bites de berenjena del aceite y ubícalos sobre un plato cubierto con papel absorbente.
Sírvelos mientras están calientes con kétchup o tu salsa favorita.